DÁNDOLE SENTIDO A NUESTRA VIDA

Hoy es un fresco día de primavera en El Paso, Texas, ´ la Ciudad del Sol´. Cuando ya todo mundo había guardado su ropa de invierno, la naturaleza vuelve a sorprendernos con su clima caprichoso… y qué rico, la verdad es delicioso dormir calientito (aquí en su casa que es la mía o en la mía que es la suya, aún prendemos la calefacción y yo sigo usando mis pijamas de invierno). 

Y déjenme decirles que me choca que la gente se queje de todo (y claro, yo no soy la excepción, pues me quejo de ellos, jajaja): que si todavía hace frío, ¿cuándo se irá a acabar?;  que si hace calor en primavera, ¡cómo irá a estar en verano!; que si esto, que si lo’tro y que si lo de más allá… ¡Tan sencillo que sería todo si aprendiéramos a vivir con una mayor aceptación!

Bueno, pues ayer escuché un video padrísimo de Ricky Angulo, el “Sanador del Alma”, que me hizo ver las cosas desde otra perspectiva. El video se llama ‘Cómo encontrar tu chamán interno’.

Un chamán, de acuerdo a Ricky, es una persona responsable de sus actos (no es ni víctima, rescatador ni victimario). Es un creador consciente de su realidad que sabe cómo programar -mediante rituales- su universo personal para tener la vida que elija. Él sabe que las cosas no pasan ‘por algo’, como solemos decir, sino que las cosas pasan porque nosotros creamos consciente o inconscientemente las condiciones para atraer a nuestra vida situaciones buenas o malas. 

En otras palabras, tenemos pleno control de nuestra vida y podemos darle la vuelta a la tortilla y darle un sentido a todas nuestras acciones. 

Por ejemplo, explicaba Ricky, si tengo muchos trastes que lavar, en lugar de quejarme o de hacerlo como autómata,  puedo utilizarlo para ser una mejor persona. ¿Cómo? Ah pues dándole un sentido mediante un ritual. ¿Y qué es un ritual? Es cualquier acto que tenga un propósito más elevado (los rituales sirven para reprogramar nuestro ‘sistema operativo’, o sea, nuestra conciencia).  

Volviendo al ejemplo anterior, fácilmente podemos aprovechar ese acto y decir: “A través de lavar los trastes limpio todo lo que tengo que sanar del conflicto con Fulanita de Tal”.

Otros ejemplos son: 

“A través de lavarme los dientes limpio todas las cosas negativas que le haya dicho a Sutanita”. 

“A través de arreglarme y embellecerme exteriormente, saco lo mejor de mi belleza interna”. 

Y lo mismo podemos hacer con el clima: “A través de ponerme una chamarra, arropo y consiento a mi niña interior, dándole el amor que necesita”… o algo así. En realidad, tenemos un sinfín de posibilidades ante nuestros ojos, solo es cuestión de identificar aquello que necesita ser reparado y poner manos a la obra. Así mataremos dos pájaros de un tiro: hacemos lo que tenemos que hacer y vamos sanando poco a poquito. Los invito a aplicarlo en su diario vivir… yo ya empecé. 

Y como dice mi querido primo Feralonchi en los comerciales: “Inteligente, ¿no?”

Facebook Comments

Leave a Reply

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.